GUIAS DE PRACTICAS CLINICAS
Las guías de práctica clínica (GPC) tienen una larga y reconocida trayectoria en medicina y proporcionan recomendaciones que orientan el manejo clínico en escenarios definidos. Estas recomendaciones se basan en evidencias de revisiones sistemáticas rigurosas y en la síntesis de la literatura médica. Las GPC también son importantes para intentar reducir la heterogeneidad en la práctica clínica y como soporte para los tomadores de decisiones, las aseguradoras y los prestadores. Estas se convierten en un soporte cuando se integran las preferencias y los valores de los pacientes con el criterio profesional y los recursos disponibles, con el fin de obtener el mejor resultado integral para el paciente[1].
[1] Rev. Colomb. Reumatol. vol. 19 núm. 2 junio de 2012.
El IGETS puede brindar asesoría técnica o realizar GPC en las siguientes modalidades:
1
De Novo
GPC de partida que utiliza a la literatura primaria como sustrato principal de búsqueda y análisis; es desarrollada a través de un proceso estructurado que sigue la sistematización de la Medicina Basada en la Evidencia (MBE) sobre un tópico en específico (seleccionado en base a condiciones predeterminas de priorización) estableciendo criterios explícitos que permitan se reproducibilidad siguiendo unos pasos determinados. (MINSA 2015)
2
Adaptada:
GPC modificadas respecto a su versión original para su uso en un contexto cultural y organizacional (lenguaje, valores, sistema de salud, etc.) diferente para el cual fue creado. (MINSA 2015)
3
Service Name
GPC en la cual se sigue un proceso que consiste en elegir la mejor guía y aceptar las recomendaciones tal cual se presentan. (IETSI- ESSALUD 2016)